Y es que un trailer puede ser espectacular, increíble, lleno de efectos... y nada... al final, tan sólo son los mejores 50 segundos de una película sosa. O al contrario, nos podemos llevar una impresión equivocada según nos lo presenten...
Ya he dejado en alguna ocasión algunos videos como el de hoy... pequeñas bromas que convierten películas de un estilo en otro totalmente diferente, tan sólo con un par de efectos de sonido, mezclando algunas imágenes y jugando con las escenas de la película.
La película más pastelosa de la historia, una romanticona historia entre los dos actores más cursis de aquel momento: Sleepless in Seatle, convertida en un thriller con un par de ajustes... resumiendo, pa lo que sirve un trailer...

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jajajajajajajajaja que bueno!! no puedo parar de reirme
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